El expresidente Donald Trump se enfrentará a un juicio penal en Nueva York el próximo 25 de marzo de 2024, según anunció un juez el martes.
Esta noticia adquiere aún mayor relevancia debido a que el juicio coincidirá con el apogeo de la campaña para la nominación republicana de 2024, en la cual Trump es considerado como uno de los principales contendientes.
Trump se encuentra acusado de falsificar registros comerciales con el fin de ocultar un pago secreto realizado a una estrella porno. Se espera que durante la próxima primavera, el expresidente recorra el país en compañía de otros candidatos en busca de la nominación presidencial, mientras los diferentes estados llevan a cabo sus respectivas competencias.
La fecha del juicio fue anunciada por el juez Juan Merchan de la corte estatal de Manhattan durante una audiencia en la que Trump compareció de forma remota desde Florida, junto a su abogado Todd Blanche.
Durante la audiencia, Merchan también informó a Trump sobre las restricciones que se impondrán a su capacidad para discutir públicamente ciertas pruebas presentadas por los fiscales.


Trump ha declarado su inocencia frente a los 34 cargos penales que se le imputan. A través de una publicación en su plataforma Truth Social, realizada después de la audiencia, el exmandatario afirmó que sus derechos a la libertad de expresión estaban siendo violados al programar el juicio para el 25 de marzo, justo en medio de la temporada de primarias, y lo calificó como una «INTERFERENCIA ELECTORAL».
Los fiscales de Nueva York sostienen que Trump intentó ocultar los reembolsos realizados a su entonces abogado Michael Cohen por un pago de 130.000 dólares a la actriz porno Stephanie Clifford, conocida como Stormy Daniels.
Cohen ha afirmado que realizó el pago a cambio de su silencio sobre un supuesto encuentro sexual con Trump antes de las elecciones de 2016, algo que el expresidente ha negado.
Según los fiscales, estos reembolsos ocultaron violaciones de la ley electoral de Nueva York y excedieron los límites de contribución de campaña establecidos por la ley electoral federal.
En relación a las restricciones impuestas a Trump, el juez Merchan afirmó durante la audiencia que no tenía intención de limitar su capacidad para llevar a cabo su campaña política y que el exmandatario era libre de negar los cargos y defenderse de los mismos.


No obstante, advirtió que si Trump viola las restricciones impuestas, podría ser declarado en desacato al tribunal.
Estas restricciones se refieren principalmente a las actas del gran jurado, las declaraciones de testigos y otros materiales que los fiscales deben proporcionar a la defensa para la preparación del juicio.
Los fiscales argumentan que estas restricciones son necesarias debido al historial de ataques de Trump en las redes sociales y al riesgo de que los testigos puedan sufrir acoso.
El juicio penal de Trump en marzo promete generar una gran atención mediática y política, ya que el expresidente se verá inmerso en un proceso legal crucial mientras busca nuevamente la presidencia de Estados Unidos.
La campaña en pleno apogeo y el desarrollo del juicio serán sin duda temas de gran relevancia en el panorama político y mediático del país.