En una reciente controversia que sacude al estado de Florida, los abogados del gobernador Ron DeSantis, reconocido republicano y posible candidato presidencial en 2024, han solicitado la descalificación de un juez federal encargado de supervisar una disputa legal entre DeSantis y la compañía Walt Disney Co (DIS.N).
Esta solicitud plantea serias dudas sobre la imparcialidad del juez en cuestión.
La polémica se inició cuando Disney demandó a DeSantis en abril, alegando que el gobernador había utilizado al gobierno estatal para tomar represalias contra la compañía debido a sus críticas a una ley que prohibía discutir temas relacionados con la sexualidad e identidad de género en las aulas con niños más pequeños.


Esta ley, conocida como la «ley no digas gay», generó fuertes críticas y fue etiquetada como discriminatoria por sus oponentes.
En su demanda, Disney argumentó que DeSantis había reunido a la legislatura controlada por los republicanos para contrarrestar a lo que ellos denominaron como «Disney despertado», buscando tomar el control de un distrito administrativo que había sido creado en 1967 para ayudar a Disney en el desarrollo de sus parques temáticos y resorts.
Este distrito, originalmente conocido como Reedy Creek Improvement District, también fue incluido como demandado en la demanda.
En respuesta a estas acusaciones, los abogados de DeSantis presentaron una moción el pasado viernes en Tallahassee, Florida, solicitando que el juez federal de distrito Mark Walker sea recusado en el caso.


Argumentaron que el juez había demostrado una posible parcialidad al mencionar a Disney como ejemplo de represalia estatal en casos separados que había manejado anteriormente.
En su moción, los abogados de DeSantis señalaron que, considerando las declaraciones de Walker, la imparcialidad del tribunal en este asunto podría ser cuestionada razonablemente.
Esta petición de descalificación del juez se produce en un momento crucial, ya que se espera que DeSantis anuncie su participación en la contienda por la nominación presidencial republicana en los próximos días.
Si se confirma su candidatura, podría convertirse en un rival potencialmente desafiante para el favorito actual, Donald Trump. En caso de obtener la nominación republicana, DeSantis se enfrentaría al presidente Joe Biden, demócrata, en las elecciones de noviembre de 2024.
Este incidente plantea serias preocupaciones sobre la independencia del poder judicial y la influencia política en los procesos legales.


La disputa entre DeSantis y Disney no solo ha capturado la atención de la opinión pública, sino que también podría tener un impacto significativo en el panorama político nacional.
La batalla legal continúa y se espera que las decisiones futuras sobre la descalificación del juez y la resolución de la disputa arrojen luz sobre los límites del poder gubernamental y el sistema de justicia en Estados Unidos.
Es importante destacar que, aunque se debe respetar la presunción de inocencia de todas las partes involucradas, la gravedad de las acusaciones y la relevancia política del caso hacen necesario un análisis exhaustivo y una atención constante a medida que se desarrolla esta historia en curso.