El juez Alexandre de Moraes, un antiguo adversario de Bolsonaro que actualmente dirige el Tribunal Superior Electoral (TSE), se unió a la mayoría y expresó que Bolsonaro había difundido una «cadena de mentiras y noticias fraudulentas» en su discurso «radical» dirigido a los embajadores.


El equipo de Lula celebró el resultado del juicio del TSE, considerándolo un hito importante. El ministro de Justicia, Flavio Dino, tuiteó: «Algunos mensajes importantes surgen del juicio del TSE: mentir no es una herramienta legítima para ejercer una función pública y la política no se rige por la ley de la selva. La democracia ha superado su prueba de estrés más dura en décadas».
Bolsonaro ha negado haber actuado mal y sus abogados tienen la intención de presentar una apelación ante la Corte Suprema, aunque las fuentes señalan que es poco probable que tenga éxito.
El viernes, Bolsonaro describió la decisión como una «puñalada por la espalda» y afirmó que seguirá trabajando para promover la política de derecha en Brasil. Sin embargo, la resolución del TSE no pone fin a los problemas de Bolsonaro, ya que aún enfrenta múltiples investigaciones criminales que podrían llevarlo a prisión.
¿Dónde se encuentra Bolsonaro en este momento? Aunque sus propias esperanzas de vencer a Lula en 2026 pueden haberse desvanecido, Bolsonaro ha manifestado su apoyo a su esposa, Michelle, como candidata.
Aunque es una política novata, se declara una cristiana evangélica que podría ganarse el apoyo de la derecha religiosa que desconfía de Lula.
«‘Nuestro sueño está más vivo que nunca'», escribió en Instagram después del fallo. «Estoy a sus órdenes, mi CAPITÁN».
Aún es posible que Bolsonaro haga un regreso. Lula estuvo en prisión en 2019, pero su condena por corrupción fue anulada. Ahora es el presidente.
Los analistas de Arko Advice señalan que Bolsonaro todavía goza de un gran prestigio político. En una nota dirigida a sus clientes, escribieron: «Todavía no hay una alternativa de derecha o de centroderecha con la fuerza de Jair Bolsonaro. Como resultado, el expresidente sigue siendo el principal antagonista del presidente Lula».
Durante su mandato, Bolsonaro, un admirador de larga data del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, recibió críticas internacionales por su manejo cuestionable de la Amazonía, su enfoque laissez-faire frente a las restricciones de la COVID-19 y sus ataques infundados al sistema electoral de Brasil.


El juicio del TSE forma parte de un ajuste de cuentas más amplio en Brasil con las secuelas de las elecciones más controvertidas del país en una generación.
Mientras Bolsonaro enfrentaba el escrutinio del tribunal electoral, muchos de sus antiguos aliados están siendo cuestionados por los legisladores en una investigación del Congreso sobre los disturbios ocurridos el 8 de enero.