El partido gobernante en México dio un fuerte golpe a la oposición al capturar uno de sus bastiones más importantes justo antes de las elecciones presidenciales.
Los resultados preliminares revelaron que el Movimiento Regeneración Nacional (MORENA), liderado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, se perfila como ganador en las elecciones para gobernador del Estado de México, con una ventaja proyectada de 8 a 10 puntos porcentuales, según el instituto electoral estatal.
Esta victoria consolida el control del partido sobre la región más poblada de México y se suma a los otros 21 estados que MORENA ya gobierna, representando ahora más de dos tercios del total.


Además, un estado más está gobernado por un grupo aliado de MORENA, lo que otorga al partido una sólida base de poder de cara a las elecciones presidenciales que se llevarán a cabo el 2 de junio de 2024.
El resultado de esta elección también marcó un hito en la política mexicana al relegar al Partido Revolucionario Institucional (PRI), históricamente poderoso en el país, a un nuevo mínimo.
Esto representa otro paso en el reemplazo de MORENA como el partido dominante en la segunda economía más grande de América Latina.
El PRI, partido centrista que ha gobernado el Estado de México desde 1929, experimentó una derrota significativa. Durante décadas, el PRI mantuvo un dominio ininterrumpido sobre el país, hasta su derrota en la elección presidencial de 2000.
Aunque logró recuperarse y retomar la presidencia en 2012, fue derrotado seis años después por López Obrador y su partido.
Tras la votación, Delfina Gómez, la candidata de MORENA, celebró la victoria frente a sus seguidores y destacó el combate a la corrupción y la negligencia como los principales logros de su partido. Gómez se convertirá en la primera mujer en gobernar el Estado de México.


Con el 66% de los votos contabilizados, Gómez obtuvo el 53% de los votos, mientras que su rival, Alejandra del Moral, del PRI, quien encabezaba una coalición de partidos de oposición, obtuvo el 44%.
Sin embargo, también hubo un recordatorio para MORENA en esta jornada electoral. En una votación separada para gobernador en el estado fronterizo de Coahuila, el PRI logró una victoria aplastante contra MORENA, aprovechando las luchas internas del partido del presidente, lo que llevó a la aparición de candidatos rivales. Hasta el momento, el PRI sigue sin ser derrotado en Coahuila.
López Obrador ha instado a su partido a mantenerse unido de cara a las elecciones presidenciales, incluso enfrentándose a excompañeros que se han distanciado de MORENA.
Desde que asumió el cargo en diciembre de 2018, el presidente ha dominado la política mexicana y mantiene una popularidad cercana al 60%, lo que ha convertido a MORENA en una máquina electoral temible. Según la legislación mexicana, los presidentes solo pueden servir un período de seis años.
No obstante, su retórica confrontacional, que ha polarizado a los votantes al enfrentarse con el sector empresarial y ejercer un mayor control sobre el poder judicial, ha generado tanto apoyo ferviente como rechazo contundente.


La alcaldesa de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, ha sido la favorita en la mayoría de las encuestas para convertirse en la candidata presidencial de MORENA, seguida de cerca por el canciller Marcelo Ebrard.
Sheinbaum, al igual que Gómez, está estrechamente alineada con López Obrador y sus políticas, y algunos analistas consideran que la clara victoria de MORENA en el Estado de México augura buenas perspectivas para sus aspiraciones presidenciales.
Poco después de que concluyera la votación, Sheinbaum compartió en Twitter una foto sonriente junto a Gómez, celebrando su victoria en la elección.