Todos los ojos en Brasil están puestos en Michelle Bolsonaro mientras la carrera de su esposo implosiona. El expresidente Jair Bolsonaro, conocido por su nacionalismo de extrema derecha, se encuentra en medio de una crisis política después de que el Tribunal Federal Electoral (TSE) de Brasil dictaminara que está prohibido ocupar cargos públicos hasta 2030.
Esta decisión se debe a las afirmaciones infundadas que hizo Bolsonaro sobre el sistema de votación del país durante las elecciones del año pasado. La noticia ha generado un gran impacto en el panorama político brasileño y ha dejado a muchos preguntándose qué sucederá a continuación.


A medida que Jair Bolsonaro enfrenta esta prohibición y también se enfrenta a múltiples investigaciones penales que podrían llevarlo a la cárcel, las miradas se dirigen a su esposa, Michelle Bolsonaro.
Michelle, una figura relativamente nueva en la política brasileña, ha captado la atención de muchos con su comportamiento carismático y su énfasis en los valores tradicionales.
Durante la campaña presidencial de 2022, Michelle se volvió cada vez más visible en los eventos políticos de Bolsonaro, especialmente en su intento de atraer a las votantes femeninas. Esto le ha valido el reconocimiento y el apoyo de las mujeres brasileñas de clase trabajadora.
La carrera política de Michelle Bolsonaro ha tomado impulso recientemente, y ella misma ha expresado su interés en postularse para un cargo en el futuro. En una publicación en Instagram después del fallo del TSE, Michelle escribió: «‘Nuestro sueño está más vivo que nunca’… Estoy a sus órdenes, mi CAPITÁN».


Esta declaración ha llevado a especulaciones sobre una posible candidatura presidencial de Michelle en las elecciones de 2026. Su perfil en aumento y su popularidad entre ciertos sectores de la población brasileña podrían convertirla en una figura política influyente en los próximos años.
Sin embargo, Michelle Bolsonaro no es la única miembro de la familia Bolsonaro con ambiciones políticas.
Dos de los hijos de Jair Bolsonaro de un matrimonio anterior, Flavio Bolsonaro y Eduardo Bolsonaro, también están involucrados en la política brasileña. Flavio, de 42 años, es senador y desempeñó un papel importante durante el mandato de su padre, nombrando aliados en la burocracia federal.
Aunque ha sido objeto de acusaciones de corrupción que él niega, Flavio aún mantiene cierto apoyo y podría seguir desempeñando un papel relevante en la política brasileña.
Por su parte, Eduardo Bolsonaro, de 38 años, es congresista y ha sido un emisario extranjero de la familia Bolsonaro. Ha participado en ferias de armas en Estados Unidos y ha asistido a conferencias políticas conservadoras en las que se ha relacionado con destacados derechistas, como Steve Bannon.
Sin embargo, Eduardo también es una figura polarizadora y sus puntos de vista políticos marginales limitan su apoyo y alcance.


A medida que la carrera política de Jair Bolsonaro se encuentra en un momento crítico, la atención se centra cada vez más en su familia y en las posibles perspectivas políticas de Michelle, Flavio y Eduardo Bolsonaro.
Mientras Brasil se prepara para las próximas elecciones, el destino político de los Bolsonaro sigue siendo incierto, pero su influencia en el panorama político del país está lejos de desvanecerse.
La implosión de la carrera de Jair Bolsonaro ha abierto el camino para nuevas figuras políticas y ha dejado a muchos preguntándose si un Bolsonaro seguirá ocupando un cargo importante en el futuro de Brasil.